AMIA: “Galeano armó toda la maniobra para hacer las imputaciones”

Lo declaró hoy ante el tribunal Jorge Rago, un ex policía bonaerense que estuvo detenido tres años -entre 1996 y 1999- en el marco de la “Causa Brigadas”, conexa al expediente central de la investigación del atentado a la AMIA, a cargo del entonces juez Juan José Galeano. Al momento del ataque a la mutual, Rago se desempeñaba como jefe de Operaciones de la Brigada de Vicente López.

El debate oral y público por el encubrimiento del atentado terrorista a la AMIA avanzó hoy con la declaración como testigos de dos ex policías bonaerenses. Ambos estuvieron detenidos entre 1996 y 1999 en el marco de la “Causa Brigadas”, conexa a la causa central. Y en este juicio por encubrimiento integran la querella que reúne a ex policías bonaerenses, representados por Juan Manuel Ubeira y por el ex comisario Juan José Ribelli, también querellante. El juicio comenzó el 6 de agosto pasado y entre los 13 imputados están el ex presidente Carlos Menem, el ex juez federal, Juan José Galeano, dos ex fiscales y a la cúpula de la vieja SIDE, entre otros. “Galeano armó toda la maniobra para hacer las imputaciones” y “me detuvo con pruebas falsas”, aseguró Jorge Rago, el primero de los dos policías en declarar.

 

En la sala AMIA de los tribunales federales de Comodoro Py, frente el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 2, pasadas las 10 de la mañana, comenzó el testimonio de Rago, uno de los dos ex policías bonaerenses en declarar hoy. Al momento del atentado, Rago se desempeñaba como jefe de Operaciones de la Brigada de Vicente López, que en ese momento investigaba al doblador de autos Carlos Telleldín. En torno a esa investigación es que Rago fue citado por el ex juez que llevaba la causa AMIA, para que declarara sobre el último tenedor conocido del motor de la camioneta que explotó en la mutual.

En esa reunión, según declaró el ex policía (como ya lo había hecho en el juicio por el atentado), Galeano lo amenazó para que declarara en contra del comisario Juan José Ribelli o de lo contrario “todas las actuaciones de la Brigada de Vicente López le iban a caer en su contra y sería expulsado de la policía”. Rago le manifestó al ex juez que conocía muy poco a Ribelli y que no se mentiría sobre ello. Según él, esa respuesta le valió ser exonerado de la Policía.

 

“Galeano armó toda la maniobra para hacer las imputaciones” y “me detuvo con pruebas falsas”, aseguró Rago, quien además opinó que el ex magistrado que tuvo a su cargo durante una década la instrucción del sumario por el atentado a la AMIA “estuvo engañando durante años a toda la comunidad”. Rago, quien en varios pasajes de su declaración señaló con su índice a Galeano aseguró que entonces “había impunidad” y el ex juez “manipulaba los dichos de los testigos” y le hizo “bastante daño”.

 

Rago contó que el abogado Gustavo Semorile fue quien lo llevó a reunirse con Galeano y mantuvo con él una reunión "informal" en la que le dijo que si no declaraba que (Jorge) Leal se llevó la Traffic y se la dio a Ribelli lo iba a detener e iba a hacer que lo echen de la Policía. Rago contó cómo se negó y 20 días después lo detuvieron como partícipe necesario. Relató que en esa reunión no hubo abogados, ni se dejó algún tipo de constancia, aunque habría sido grabada y estaría en una de las cintas que Galeano quemó tiempo después. Y aseguró que también hubo una persecución a su hermano, policía como él, al “armarle” un legajo. Rago también detalló cómo le explico a Galeano q no había conexión entre las brigadas de Vicente López y Lanús y que tampoco había entrecruzamientos de llamadas.

 

El otro testigo

Tras la declaración de Rago se pasó a un cuarto intermedio y luego se escuchará la declaración de Diego Barreda, quien también se desempeñaba como oficial en la Brigada de Investigaciones de Vicente López y había aportado datos para concretar un intento de detención a Telleldín, a quien conocía desde 1988. Por la relación que tenía con el doblador de autos, él y su compañero Mario Bareiro colaboraron con la SIDE en la investigación del atentado. Sin embargo, más tarde fue imputado por el ex juez Galeano y recibió ofrecimientos de dinero y de mejora en su situación procesal a cambio de que modificara su declaración e involucrara al ex comisario Ribelli.

 

La semana pasada se retomaron las audiencias con el testimonio de Jorge Lew, integrante de la asociación Memoria Activa, quien denunció que los abogados de la organización tenían impedimentos por parte del juzgado a cargo de Galeano, para acceder a la información de la causa a diferencia del trato que se le daba a los letrados de la querella de AMIA y DAIA.